Tomar medidas impopulares por un bien mayor

La llegada de la Navidad, a parte de ser una fiesta para la gran mayoría de personas, muy esperada, también son fechas de controversia en cuanto a la política se refiere. Son muchas las cosas que hay que organizar para que las distintas ciudades luzcan lo mejor posible en estas fiestas.

Todo requiere un esfuerzo

La planificación es laboriosa, luces, adornos, eventos, conciertos... todo debe estar en orden para que en las fechas que llegan, no se forme un caos en el día a día de la población. Son muchos días seguidos de fiesta, algunos con vacaciones, otros siguen con su rutina, mayor movimiento en las calles, más espectáculos de lo habitual... todo tiene que estar muy bien controlado si no quieren que reine el caos en esta época.

Sin ir más lejos, el pasado fin de semana la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, anunciaba una medida extraordinaria que va a tomar el Ayuntamiento de la ciudad de cara a las fiestas navideñas. Como bien sabemos, la capital de España es un foco de tráfico diario. Son muchos los desplazamientos por las carreteras. En Navidad, las calles del centro son las que tienen más afluencia de personas, por este motivo, el equipo de gobierno ha decidido llevar a cabo el cierre de Gran Vía estas fechas señaladas.

Pensando en los ciudadanos

El motivo no es otro que ofrecer un mejor servicio a los ciudadanos para que puedan moverse por las calles más céntricas sin problemas. Aún así, Carmena es conocedora de lo que supone este cierre, por ello, se va a habilitar un carril por sentido en el centro de la calzada, salvo en el tramo de la Calle San Bernardo hasta Plaza de España, donde, habrá dos carriles en dirección hacia esta última y uno para el sentido contrario. Según Carmena, el centro tiene que estar adaptado para facilitar el tránsito de peatones. 

En cuanto a las informaciones que han llegado donde se aseguraba que el Consorcio de Transportes no tenía constancia de esta medida, la alcaldesa de la capital ha sido tajante, “entre el Consorcio y el Ayuntamiento hay una excelente relación” y apostilló que se comunicó el cierre de Gran Vía rápidamente. Por su parte, la portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Purificación Causapié ha declarado que le parece positiva esta acción, ya que puede mejorar la movilidad por las calles del centro de Madrid.

Tim Cook negociará con Donald Trump

Uno de los mayores problemas que está azotando con más fuerza, en los últimos tiempos, en Estados Unidos, es la falta de empresas en el país. No quiere decir con ésto que en América no se creen compañías, de hecho son muchas las autóctonas de este país, pero la realidad es que la gran mayoría no fabrican sus productos en su lugar de origen.

Una relación tirante

Muchos son lo nombres que componen la lista de empresas que pasa por esta situación, sin embargo, en los últimos días ha habido uno que ha destacado sobre el resto, es el caso de Apple.  Desde que Donald Trump fuera elegido como Presidente de los Estados Unidos, muchas son las críticas recibidas y otras polémicas que lo rodean a él en particular y a su política en general. Sin embargo, el líder republicano está decidido a cambiar la situación por la que pasan las grandes empresas en el país. Una multinacional como Apple no puede ni debe estar fabricando fuera de las fronteras americanas, o por lo menos, eso piensa Trump. Por este motivo, el Presidente electo no dudó en realizar una llamada telefónica a Tim Cook, actual director ejecutivo de Apple para acercar posturas sobre este tema.

Cook, por su parte fue muy duro en sus palabras, arremetió contra la regulación que existe hoy en Estados Unidos con respecto a la producción en masa de empresas como la suya. Dicha normativa, hace que se haga imposible crear una fábrica de Apple en el país americano. Cook, además, comentó a Trump que para que fuera posible este hecho, tendría que haber un gran recorte de los impuestos y así, empezar a negociar. 

Buscando una salida

Parece ser que los impuestos que pagan las multinacionales como Apple en Estados Unidos roza cantidades desorbitadas, de ahí el descontento de los grandes empresarios que se ven casi “obligados” a salir de la frontera americana para instalar su fábrica de producción.

A pesar de que obtuvo una respuesta rotunda, Donald Trump está dispuesto a estudiar lo que le ha planteado Cook y tiene como objetivo que Apple termine por construir una gran planta en Estados Unidos, una o varias, apuntilló el Presidente electo. Apple, por su parte, muestra su descontento ante esta situación, aunque tampoco le influye demasiado pues están satisfechos con dar trabajo a muchos estadounidenses en las áreas de ingeniería o soporte técnico y no en el ensamblando de teléfonos, tablets u ordenadores.