Tres
empresas españolas del sector aeroespacial están tratando de
tú a tú a los grandes del sector. Tres empresas cuyos equipamientos
tecnológicos hace tiempo que van a bordo de los satélites, de los
orbitadores de otros planetas y de otros ingenios que están
ensanchando nuestro conocimiento sobre el Universo.
Nos
referimos a GMV, Sener Espacio y Crisa. De las tres, GMV es la única
empresa española del sector aeroespacial que mantiene toda su
independencia, Sener Espacio y Crisa mantienen sus proyectos en
colaboración o con el amparo de grandes firmas mundiales del sector.
Sener Espacio en colaboración con el grupo industrial Sener nacido
en las décadas de 1950-1960, Crisa dentro del consorcio europeo
EADS.
Unidas
por Rosetta
Estas
tres empresas españolas del sector aeroespacial han marcado
un hito en la difusión de la tecnología española al figurar con
sus equipos, y al mismo tiempo, en el proyecto de la sonda espacial
Rosetta de la Agencia Espacial Europea que ha tenido como destino
tomar tierra en un cometa en pleno camino hacia encuentro con el sol.
GMV
se encargó de la navegación de la sonda Rosetta, del análisis de
la misión; Sener Espacio, construyó dos mástiles desplegables con
los que efectuar mediciones de temperaturas, diseñó los filtros de
las cámaras y terminó unas persianas extensibles que ayudan a la
sonda a regular también sus temperaturas. Crisa, por su parte, se
encargó de diseñar y de fabricar la cámara de navegación, una
unidad de control básica y los ordenadores de abordo.
Lo
más sorprendente de estos proyectos es que estas tecnologías
españolas aeroespaciales fueron incorporadas al proyecto de la
sonda Rosetta hace diez años cuando el ingenio se lanzó al espacio.
En el tiempo transcurrido, las tres empresas españolas del sector
aeroespacial ya no son lo que eran. Han evolucionado, se han
diversificado y han ganado aún más peso en su sector industrial.
Por ejemplo, CRV está embarcada en el desarrollo del programa
Galileo, el gps europeo.
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